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Presos políticos

Diez policías y militares venezolanos sentenciados a pena máxima por supuestamente conspirar con Leopoldo López

Foto DGCIM
Foto DGCIM
"Son venezolanos humildes", asegura la abogada de uno de los detenidos quien lamenta la poca visibilidad en los medios de comunicación de este caso.

La noche de este lunes 18 de marzo se conoció la sentencia de 30 años de cárcel, pena máxima en Venezuela, contra diez hombres -entre militares y policías-detenidos y llevados a juicio por una supuesta conspiración que llamaron “honor y gloria”.

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Se trata de diez hombres detenidos en diciembre de 2019 y el encargado de exponer el caso fue Jorge Rodríguez, hoy presidente de la Asamblea, quien alegó que el grupo – en su mayoría de Sucre y Anzoátegui- había sido reclutado por el partido de Leopoldo López y Juan Guaidó; Voluntad Popular, para cometer asaltos a cuarteles militares.

"Hace pocos minutos, la juez Primera de Juicio con competencia en casos de Terrorismo, condenó a 30 años de prisión por los delitos de terrorismo, conspiración y asociación a los 10 acusados en el caso denominado "Honor y Gloria", escribió el abogado Joel García.

Entre los hombres están los policías Sixto Salamanca, José Miguel Yeguez, y Josnars Adolfo Baduel Oyoque. Además de César Mayora, Alexi Jiménez, Deivis Malavé, Luis Lira, Juan Carlos Macualo (Apure), Jesús Castro y Víctor Rodríguez (Barinas).

Meses pasados la periodista Sebastiana Barráez publicó un artículo con sus rostros en el portal INFOBAE.

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César Mayora - GNB
César Mayora - GNB

La Coalición por los Derechos Humanos publicó una foto que revela el increíble deterioro de uno de los detenidos; el sargento primero de la Guardia Nacional, César Mayora, cuya familia denuncia torturas en la DGCIM, del que posteriormente fue sacado y trasladado al Rodeo III.

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Actualmente siete están en la cárcel de El Rodeo III, uno en el Rodeo II y uno en la cárcel militar de Ramo Verde, donde estuvo detenido Leopoldo López a pesar de ser un civil.

Ninguno había aceptado los cargos y los familiares habían advertido la falta de pruebas y todos fueron condenados por: traición a la patria, terrorismo y asociación para delinquir.

La abogada del caso, María Alejandra Poleo, informó que lo curioso del caso es que los acusan de tener un grupo en WhatsApp cuando ellos "no tenían teléfono inteligente" y fueron detenidos en distintos puntos del país y en distintas oportunidades.

"Son venezolanos humildes", asegura la abogada quien lamenta la poca visibilidad en los medios de comunicación de este caso.

El Observatorio Nacional de Derechos Humanos denunció que el caso "es muestra del patrón documentado y denunciado por este Observatorio, respecto a la utilización del sistema de justicia, como brazo ejecutor de políticas represivas y de persecución política, violando así el derecho al debido proceso y todas las garantías constitucionales".

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"Reiteramos nuestro llamado a las instancias nacionales e internacionales de DDHH, para que intercedan en favor de todos los presos políticos y víctimas de estos patrones sistemáticos empleados para someter a la población".


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